viernes, 20 de agosto de 2010

PAGO DE CHILE, por Horacio Balmelli Urrutia.


PAGO DE CHILE

Escribe Horacio Balmelli Urrutia


Quienes, vieron por televisión la serie “MANUEL RODRÍGUEZ – El Guerrillero del Amor”, no pudieron escaparse de revivir diariamente ciertos conocidos aspectos de nuestra historia a comienzos del siglo XIX y es así como hombres con distintas personalidades como Francisco Casimiro Marcó del Pont, Vicente San Bruno, Manuel Rodríguez y Miguel Neira se mostraron bastante bien representados por los actores del caso.


Dentro de los antecedentes de estos personajes podemos decir que Marcó del Pont Angel Díaz y Méndez nació en Vigo el año 1770 y luego de una brillante carrera militar en la que alcanzó el grado de mariscal de campo, fue nombrado como Gobernador de Chile en 1815. Este hombre, contrariamente a su formación castrense, se destacó por su personalidad afeminada y sus gustos exóticos.


Vicente San Bruno Rovira nació en Zaragoza y sus primeros pasos en su juventud fueron como lego, o sea tras obtener una ordenación religiosa en la congregación franciscana.; sin embargo, en 1808 desistió de dicha iniciativa e ingresó al campo de las armas hasta que en 1814 fue destinado a Chile inicialmente con el grado de Capitán y para hacerse cargo del Regimiento de los Talaveras de la Reina, unidad que alcanzó características represivas entre los criollos en vez de desarrollar funciones de seguridad como se le había encomendado. De esta forma San Bruno se caracterizó por las torturas y asesinatos que personalmente hizo en la cárcel de Santiago, causando no solo miedo en la población sino, un gran rencor entre los patriotas de tal modo que, luego de la victoria de Chacabuco en 1817, fue apresado, juzgado y ejecutado en la Plaza de Armas de la capital el 12 de Abril del mismo año, cuando ostentaba el grado de Coronel y para contento de muchos.


En el caso de Manuel Rodríguez Erdoyza y José Miguel Neira Mondaca debe considerarse que, ambos mas que ser guerrilleros o bandoleros como se les llegó a calificar erróneamente en esa época, fueron unos destacados hombres que, con valentía, astucia y esfuerzo, lideraron la resistencia patriota en Chile hasta la espera de que el Ejército Libertador atravesara la Cordillera de los Andes en pos de la Independencia de nuestro país, arriesgando varias veces sus propias vidas.


Lamentablemente estos valerosos patriotas tuvieron un triste e injustificado final. Como bien sabemos, Manuel Rodríguez dejó el mando del Regimiento “Húsares de la Muerte” – unidad que él mismo comandaba como Teniente Coronel- y que fue disuelta después del triunfo de Maipú el 5 de Abril de 1818, luego de lo cual fue detenido con la intención de conducirlo hasta Valparaíso pero, en las cercanías de Til Til fué alevosamente asesinado el 26 de Mayo de 1818 con un balazo en la espalda que le disparó el Teniente Antonio Merino, de la escolta, cumpliendo así una orden del argentino Bernardo Monteagudo, miembro de la Logia Lautarina y que años mas tarde lo confesó con la excusa de los ejecutores de que Rodríguez había intentado escapar.


Respecto a José Miguel Neira, que también dejó de actuar militarmente como Coronel de Milicias luego de consolidada la Independencia, no hubo para él una compensación y en cambio, como reiniciara sus actividades delictivas en los campos, fue apresado en Talca y fusilado en 1817.


La curiosidad de estos casos nos mueven a reflexionar comparativamente al gran aporte que estos dos patriotas hicieron a la causa independentista y plantear interrogantes tales como:


¿Por qué no se les aplicó una suerte de indulto en el caso de que hubieran cometido algo en contra del nuevo orden de la naciente República....?


¿Por qué no se fué justos con ellos, teniendo en cuenta el valioso aporte que hicieron a la Patria ...?


Entonces, hoy cabe hacer la siguiente reflexión:


¿ Fué en aquellos años en los que empezó a emplearse el conocido término: EL PAGO DE CHILE...?

(Tomado de http://eldiezdeungranmes.blogspot.com/)