jueves, 27 de octubre de 2011

¿Cuándo se jodió Chile?

¿Cuándo se jodió Chile?

Alexander Kliwadenko. Director Social Un Techo para Chile

Benito Baranda, Presidente Fundación América Solidaria





Con mucha preocupación vemos que el conflicto estudiantil se encuentra inmovilizado, y que su encauzamiento no puede demorar más. Sabemos que la dilatación de estos problemas redunda principalmente en perjuicio de los más postergados, siempre y sin excepciones. Así como Mario Vargas Llosa en su libro “Conversación en la Catedral” lanzaba esa pregunta por el Perú, ¿tendrán las próximas generaciones chilenas que intentar responder a la misma pregunta en 15 o 20 años más, remontándose a nuestro momento actual?





Hay algunos indicios de que sí. Conviene recordar ese proverbio: una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil. Y vaya que este país tiene eslabones débiles. Y entre los más débiles se cuenta la educación.





Hoy estamos ante la oportunidad histórica de hacer una significativa reforma a la educación, que lleve nuestro sistema educativo a un nivel superior. El país está abierto a realizar transformaciones profundas que nos pongan en camino a ser una sociedad integralmente desarrollada.





Pero no hay acuerdos. Al contrario, ya estamos en presencia de mezquinas escaramuzas que no aportan mucha esperanza.





¿Iremos a perder una nueva oportunidad para sentar las bases y dar un giro radical en la calidad de la educación, en igualar y democratizar los accesos a ella?





Hay ciertas similitudes entre el momento actual y el que se vivió en Chile a comienzos del siglo XX en la discusión de la Ley de Instrucción Primaria Obligatoria. Hoy, los argumentos que se utilizaron para oponerse a ella parecen irrisorios. Con todo, demoraron 20 años la promulgación de aquella ley. La clase política actual también puede enfrascarse en una discusión que se alargue por años, o puede convocar a un gran pacto social para que resolvamos este problema pronto, implementando las reformas necesarias con mirada de largo plazo, donde los ciudadanos pongamos nuestro esfuerzo desde el compromiso de las mismas familias hasta aquel financiero vía tributos.





Pero si es tan evidente, ¿qué lo impide?





Las primeras críticas son para el Gobierno. Pueden formularse varias, pero no es sino la intención deliberada de quebrar la mesa de diálogo lo que parece más grave. El Gobierno apuesta a la disolución del movimiento. Dice que quiere el diálogo, pero da indicios de que su intención es que la Confech se polarice. No les tiende una mano a sus voceros, que representan dentro de ella las posiciones más cercanas al diálogo. En un momento en que se requiere un gran pacto social por la educación, y como todo gran pacto requiere consensos, quiere imponer su pensamiento completo en la materia (adoptado con antelación). No tiene noción de que está en un momento único, de esos como los que se vivieron a comienzos del siglo XX. Olvida que resulta imperioso mostrar a la generación que fue parte del movimiento de los pingüinos y que hoy también lo es de este nuevo movimiento estudiantil, que la democracia es capaz de escucharlos, crear espacios de participación y dar soluciones a sus demandas. Si por segunda vez experimentan el fracaso y la resignación, es muy posible que la tercera vez el descontento social explote realmente, con mayor rabia y violencia.





La oposición, ni qué decir, tampoco ha estado a la altura. Fluctúa entre la adulación a las masas estudiantiles, el desconcierto ante el contexto que vive el país y las rencillas internas. Hasta el momento, no ha sido capaz de aportar al encauzamiento de lo que hay de fondo en las demandas estudiantiles.





Y también, por cierto, cabe deslizar una crítica a los estudiantes:





Dentro de sus líderes los con más capital político son aquellos en quienes la ciudadanía confía y con los que empatiza: Giorgio Jackson y Camila Vallejo. También han mostrado ser de los más razonables dentro del movimiento estudiantil. Por cierto que esas asambleas a las que asisten no deben de ser fáciles de llevar. Hay posiciones extremas que están lejos de ser representativas de lo que quiere el país. Ante cada salida de libreto de los voceros, aparece un llamado al orden por algún otro miembro de la Confech. Quizás ya es demasiado tarde (vienen sus elecciones), pero deben tomar ese capital político que tienen y arriesgar algo antes de partir. Deben hacerles frente a los grupos más extremos de la Confech y hacer valer lo que han logrado para buscar una salida al conflicto. Deben saber forzar el diálogo que hoy está paralizado, y el cual anhela la gran mayoría de quienes vivimos en Chile; deben ser capaces de conducir el descontento social hacia el diálogo democrático. Ellos también tienen responsabilidad en el diálogo roto.





Estamos en un momento clave, en uno de esos momentos escasos que cambian la historia de una nación. Si hacemos lo correcto, en 20 años más miraremos al pasado y diremos: este fue el tiempo en que se dio el salto definitivo de Chile a una sociedad integrada desde la diversidad cultural e inclusiva en lo social; el momento en que pasamos de una sociedad de privilegios a una de derechos, de una cultura de la caridad y el asistencialismo a un orden en donde impera la justicia y la promoción social para todos.





No desperdiciemos la oportunidad.

jueves, 20 de octubre de 2011

El derrumbe de la confianza pública, por Juan Carlos Altamirano..


El derrumbe de la confianza pública

por Juan Carlos Altamirano.

En la última encuesta realizada por la Universidad Diego Portales, el Presidente Piñera obtuvo el triste récord de 28,8 puntos de aprobación. Sin embargo, más preocupante y significativa es la caída de la confianza de las personas en las instituciones. En un año, la Iglesia Católica baja del 42,9% al 24,1%; Carabineros, del 58,8% al 47,1%; las grandes empresas, del 27,9% al 16,5%. Aún peor es la escasa confianza en las instituciones políticas: un 7% para los partidos y un 11,1% para el Parlamento. A su vez, sólo un 18,3% confía en los tribunales de Justicia. De acuerdo a estos índices, estamos frente a una severa crisis de confianza pública (fenómeno que también se expresa en Europa). Cabe preguntase entonces: ¿Qué implica una crisis de confianza?



La confianza es una necesidad emocional que nos permite relacionarnos con las personas y las instituciones en forma sana: sin estar dominados por la incertidumbre, por el miedo y la angustia. La confianza nos proporciona estabilidad y tranquilidad. Confiamos en que los médicos nos curarán, la policía nos defenderá, los tribunales harán justicia, la Iglesia nos amparará. Es decir, se tiene confianza cuando uno cree que la otra persona o institución se comportarán adecuadamente y no actuarán en contra de uno, defendiendo sus propios intereses.



Pues bien, los escándalos financieros, los abusos cometidos por grandes empresas a clientes y consumidores, el dogmatismo, la intransigencia y las promesas incumplidas de los gobiernos, la deshonestidad y las mentiras en la política, el doble estándar de instituciones llamadas a dar el ejemplo y proteger a las personas, la impunidad y la corrupción... todas estas conductas de entes públicos y privados son las que han minado la confianza de las personas.



Cuando las instituciones traicionan la confianza que la gente deposita en ellas, las consecuencias son múltiples. La extraordinaria volatilidad del mercado bursátil está directamente relacionada con la pérdida de confianza de los inversionistas en el sistema financiero mundial.



Sicológicamente, las personas se sienten vulneradas, desorientadas, escépticas, temerosas o frustradas. Pero también la desconfianza genera rabia, violencia y rebeldía. La sensación de estar desprotegido produce naturalmente la necesidad de hacer justicia o defenderse por sí mismo. Cuando estas emociones terminan dominando la psiquis social, entonces se dan las condiciones subjetivas que provocan los estallidos sociales, la inestabilidad política y económica o, bien, las rebeliones y revoluciones.



Así pues, a mi juicio, la crisis de confianza que vivimos actualmente explica en importante medida las revueltas sociales y las demandas de cambios que progresivamente se expresan en Chile y Europa. Por esta razón, hay quienes sostienen que una crisis de confianza no es necesariamente negativa: es una parte intrínseca de los procesos de transición y cambio, tanto en la vida de la gente como en el plano social. Las personas se replantean sus creencias e ideas, se cuestionan la realidad y la verdad, todo lo cual induce al cambio. A modo de ejemplo, la denuncia de abusos sexuales contra niños al interior de la Iglesia llevó al Vaticano a tomar medidas inéditas en su historia, con el objeto de terminar con la impunidad y el encubrimiento de aquellos crímenes.



En este sentido, la confianza se recupera —lenta y gradualmente— cuando las instituciones toman conciencia de sus faltas, se hacen responsables de sus actos, y generan las instancias para hacer los cambios necesarios que impidan defraudar y humillar la dignidad de las personas. Por el contrario, cuando este proceso de limpieza interior no se realiza, las consecuencias son nefastas.



No obstante lo anterior, la encuesta de la UDP trae también buenas noticias. Felizmente, los medios de comunicación continúan gozando de credibilidad. Sin embargo, este mismo privilegio les otorga una tremenda responsabilidad: junto con defender el interés público, y transparentar el funcionamiento de las instituciones, deben también ayudar a recomponer la confianza de las personas. La prensa, la radio y la TV tienen la capacidad de orientar y crear instancias de diálogo y entendimiento, lo cual ayuda a superar este tipo de crisis. He de esperar, entonces, que los medios no traicionen la confianza que la gente les ha depositado, pues de otro modo el futuro se tornará bastante gris. Así de simple.







Tomado de Diario La Segunda.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Chávez estrecha el cerco sobre el único canal opositor.


Una multa millonaria cerca a canal opositor venezolano.

Juan Paullier, BBC Mundo, Caracas



El gobierno de Venezuela le impuso una fuerte multa al único canal opositor por el "comportamiento editorial" en la cobertura de un motín carcelario en una decisión que las autoridades de Globovisión consideran "impagable" y que supone su"quiebra financiera".



El presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), Pedro Maldonado, dijo este martes que se decidió la penalización de 9,3 millones de bolívares (unos US$2,16 millones) tras determinar que Globovisión cometió los delitos de "zozobra de la ciudadanía, incitación al desconocimiento del ordenamiento jurídico, apología del delito y odio por razones políticas".



"Estamos sancionando por el comportamiento editorial y la forma cómo abordó la noticia, cómo reiteró la noticia", dijo Maldonado.

La sanción supone el 7,5% de los ingresos brutos del canal durante 2010, según Maldonado.



Organizaciones nacionales y extranjeras critican la medida del gobierno por considerar que viola la libertad de expresión.



En tanto, las autoridades consideran que el canal infringió el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad Social en Radio, Televisión y Medios Electrónicos, conocida como "ley resorte".



Las acusaciones

Durante la llamada "crisis de El Rodeo", cuando miles de presos se amotinaron en la cárcel durante semanas, cientos de famililares de los presidiarios asistían diariamente a las afueras del centro penitenciario a la espera de novedades.



En el hecho murieron 22 presos y durante días se vivieron horas de angustias pues no se conocía los nombres de los fallecidos.



Los medios de comunicación privados no pudieron ingresar a la prisión donde se encontraban las autoridades que brindaban declaraciones a los medios estatales y debieron permanecer, junto con los familiares, a un kilómetro de la entrada.



Conatel acusó al canal de difundir durante cuatro días "las 18 declaraciones más sentidas" de los familiares de los presos y repetirlas en "casi 300 oportunidades", además de incorporar elementos que "no formaban parte del audio original como se simula en las ráfagas de metralletas".



En las afueras del penal la Guardia Nacional lanzó gases lacrimógenos para dispersar a la multitud.



Maldonado, quien dijo que Globovisión tiene "unos días para pagar la multa", también aseguró que el canal no transmitió, "con la regularidad que se produjeron", declaraciones de funcionarios del gobierno a medios estatales.



La defensa

Globovisión rechazó las acusaciones de las autoridades: "La capacidad de mentir todavía nos asombra", dijo María Fernanda Flores, vicepresidenta ejecutiva del canal.



Flores aseguró que para la cadena "esta multa económica es una sanción impagable" y dijo que la directiva del canal va "hacer todo lo posible para seguir abiertos" y "apelará donde haya que apelar".



Por su parte, Ricardo Antela, abogado del Globovisión, dijo que en el canal "no se ha simulado ninguna información".



Antela indicó que tenían información de que desde el gobierno se buscaba el "quiebre económico del canal".



Esta es la segunda vez que se sanciona a Globovisión, canal al que se la han abierto siete procedimientos.



En 2009 se le impuso una multa de US$2,2 millones en relación con la cesión de espacios a organizaciones civiles y políticas durante el paro petrolero y general de 2002-2003.



La cadena asegura estar siendo perseguida por el gobierno debido a su línea editorial crítica.



El presidente del canal, Guillermo Zuloaga, y su hijo abandonaron el país el año pasado tras la orden de captura emitida por la Justicia para procesarlos por el supuesto almacenamiento irregular de 24 vehículos.



Zuloaga, quien en el pasado sufrió el hallanamiento de su casa en una investigación por supuestamente poseer trofeos de caza (cabezas de animales) ilegales, ha denunciado que es un perseguido del gobierno venezolano.



El año pasado también el gobierno intervino el Banco Federal, tras denunciar una serie de irregularidades, propiedad de Nelson Mezerhane, accionista del canal.



Antecedentes

Chávez ha acusado al canal de mentiroso, conspirador y golpista y otros funcionarios han tildado a la cadena opositora de forajida, antidemocrática, fallida y fascista.



"Ese loco con ese cañón se va a acabar o me dejo de llamar Hugo Rafael Chávez Frías", dijo el presidente tiempo atrás en alusión al director de Globovisión.

El primer canal en recibir las críticas constantes del gobierno fue Radio Caracas Televisión (RCTV), cadena a la que en 2007 se le fue revocada la concesión.



Chávez acusaba a RCTV de conspirador y golpista, por su cobertura de los hechos que desencadenaron el intento de golpe de Estado de abril de 2002.



Venezuela es frecuentemente criticada por la situación de la práctica del periodismo en el país.



Mientras las autoridades defienden la creación de un sinnúmero de medios comunitarios y del establecimiento del Sistema Nacional de Medios Públicos, diversas organizaciones cuestionan que el gobierno esté verdaderamente abocado a la defensa de la libertad de expresión.



Pocos días atrás, en el marco del Examen Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Venezuela recibió 13 recomendaciones de parte de otros países preocupados por la situación en esta materia y el Estado las rechazó.



Una de ellas era permitir visitas de los relatores de libertad de expresión de la ONU, algo que no ocurre desde 2002.



Reacciones

La medida contra Globovisión fue defendida por algunas figuras afines al gobierno, como el vicepresidente de la Comisión de Medios de la Asamblea Nacional, Julio Chávez.



"La decisión de Conatel responde a la necesidad de sentar un precedente para que se respeten las leyes que rigen la materia. Es un canal que viene desafiando e irrespetando al Estado venezolano reiteradamente, saltando procedimientos, pues tiene que llegar el momento en que se apliquen las sanciones correspondientes", dijo.



En tanto, el Colegio Nacional de Periodistas de Venezuela estimó que "Conatel se excede en sus funciones administrativas y manifiesta una política de Estado de pretender silenciar a los medios de comunicación que recogen los reclamos de los ciudadanos".



Por su parte, uno de los miembros de la Comisión de Libertad de Expresión en la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), Claudio Paolillo, dijo que la multa impuesta a Globovisión "es un mecanismo con apariencia legal y jurídica, pero que no tiene nada de legal".



"Es una medida dictatorial, para callar un canal de televisión crítico e independiente", agregó.





Tomado de BBC Mundo

viernes, 14 de octubre de 2011

Dramática situación de cristianos en Egipto.


El lado oscuro de la "primavera árabe" que viven los cristianos de Egipto

Historias de cadáveres flotando en el Nilo, iglesias incendiadas, secuestros de jóvenes y más de una veintena de muertos forman parte del cuadro que la antigua comunidad cristiana de Egipto enfrenta con cada vez mayor crudeza, luego de la caída del régimen de Hosni Mubarak tras la "primavera árabe".



El Ejército egipcio descartó esta semana, tal como afirmó el general Adel Emara, portavoz del Consejo Superior de las Fuerzas Armadas, que sus efectivos hubieran tenido que ver con los asesinatos ocurridos durante las protestas del fin de semana pasado, que dejaron entre 25 y 36 muertos, según distintos conteos.



El Consejo también anunció que legalizará las iglesias cristianas y reforzará las sanciones contenidas en el Código Penal contra quienes ataquen a otras personas o comunidades por razones de credo, género, raza, idioma o religión.



Algunos heridos en los enfrentamientos tenían su propia versión. Uno de ellos, Mithaq Tishad, de 39 años, fue uno de las víctimas de la arremetida de blindados del Ejército sobre los manifestantes.



Era una acción pacífica. No habíamos hecho nada, simplemente llevábamos cruces. Empezaron a llegar los tanques, la gente comenzó a correr pero yo me caí y un tanque me pasó por encima de la pierna”, dijo mientras lo atendían en el Hospital Copto de El Cairo.



En tanto, el viceprimer ministro del gobierno de transición, Hazem Beblawi, miembro del Partido Socialdemócrata egipcio y de tendencia liberal, dimitió como protesta contra la represión.



Hoy viernes, unos 300 coptos marcharon desde la sede de la radiotelevisión egipcia hasta la histórica plaza Tahrir, en El Cairo, en honor a los "mártires caídos el 9 de octubre", afirmó el activista cristiano Raed al-Sharqaui. Los participantes gritaron consignas en contra el jefe del Consejo militar, Hussein Tantaui.



Y como una muestra de solidaridad interreligiosa, otra marcha integradas por musulmanes y cristianos para rechazar los incidentes se llevaron a cabo entre la milenaria universidad islámica de al-Azhar y la catedral cristiana de Abbasiya.


Pese a todo, el enrarecido ambiente ha profundizado la diáspora de los coptos, principalmente hacia Norteamérica y Australia. Según medios periodísticos egipcios, cerca de 10.000 personas han tratado de solicitar visas para salir del país sólo este año.



La situación de los coptos ha variado dramáticamente desde febrero de este año, cuando en la plaza Tahrir cristianos e islámicos se manifestaban codo a codo contra el régimen de Mubarak.

"Incluso los viernes los coptos protegían a los musulmanes mientras rezaban, y lo mismo hacían los musulmanes los domingos en favor de los cristianos", describe Gilberto Aranda, coordinador académico del Instituto de Estudios Internacionales (IEI) de la Universidad de Chile.

"Parecía en ese momento un movimiento que iba más allá de las diferencias religiosas, bajo el lema 'ni cristianos ni musulmanes, sino egipcios'", añade.


La fraternidad comenzó a trizarse conforme pasaban los meses, luego de la quema de la iglesia de Mar Girgis, en Asuán y las denuncias de secuestro de jóvenes mujeres para convertirlas a la religión rival. La paciencia de los coptos "reventó" en los violentos enfrentamientos del fin de semana pasado.



Sobre la argumentación militar de inocencia, versiones difundidas en Egipto apuntan a la responsabilidad de grupos salafistas (radicales islámicos) e incluso de ex miembros de los aparatos de seguridad del derrocado Hosni Mubarak (conocidos como "baltaguiya", o matones) como los principales incitadores de la violencia.


"Más allá de la primavera árabe, hay grupos que necesitan generar inestabilidad que justifique la mantención de estados de excepción para no seguir abriendo espacios democráticos", enfatiza Eugenio Chahuán, arabista e investigador del Centro de Estudios Árabes de la Universidad de Chile.


El mismo Patriarca copto, Chenuda III, denunció el lunes que “desconocidos se infiltraron en la manifestación y cometieron crímenes que se imputan a los coptos”.



Hemos sufrido problemas en reiteradas oportunidades, sin que los agresores sean procesados”, agregó.



Anteriores al Islam

La comunidad copta existía en Egipto mucho antes de la llegada del Islam, en el año 639, y es el remanente de la una vez poderosa potencia cristiana que fue capaz de desafiar teológicamente a Roma y a Bizancio.


Su división con respecto al catolicismo y la iglesia ortodoxa es aún más antigua que la llegada de los musulmanes. Defensores del credo monofisita, su Patriarca todavía tiene gran influencia en la iglesia etíope y en Eritrea, aunque también existe una pequeña iglesia católica copta en el Alto Egipto que reconoce al Papa de Roma.


La redoblada presión musulmana no es novedad en su historia, que ha fluctuado entre la persecución bajo los regímenes más radicalmente islámicos, como los fatimíes entre los siglos X y XII, a la tolerancia e incluso el florecimiento, como ocurrió bajo el gobierno de los jedives proclives a Occidente en el siglo XIX.


Su condición de cristianos tendió a orientarlos hacia el comercio con Europa. Hoy forman parte preferentemente de los sectores medios y relativamente acomodados de la sociedad egipcia, algo que no necesariamente los favorece frente al resentimiento de los sectores populares musulmanes.

En la actualidad constituyen entre 7 y 10% de la población egipcia, con unos 8 millones de personas, una cifra que varía constantemente debido a la permanente diáspora de sus miembros.


Bajo el régimen revolucionario nacionalista árabe de Gamal Abdel Nasser (1956-1970), más laico e izquierdista que musulmán, los coptos vivieron tiempos relativamente mejores. Ello se prolongó hasta la última época de su sucesor, Anwar Sadat (1970-1981).


Al principio de su gobierno, Mubarak también toleró a los coptos, abriéndoles algo de espacio incluso en responsabilidades gubernamentales. Un ejemplo es el ex secretario general de la ONU, Butros Butros-Ghali, quien tras topar "techo" en las aspiraciones a las que un cristiano puede llegar en la política interna egipcia, continuó su ascenso en la arena internacional.


Durante los últimos bandazos de su prolongado régimen, Mubarak también comenzó a incrementar la presión sobre los coptos en medio de la creciente oposición en su contra.



Luego de la caída del régimen, la "primavera" entre coptos y musulmanes duró sólo unos meses. ¿Qué ocurrió? "Lo que se puede decir es que la suerte de los cristianos egipcios es una campanada de alerta acerca de los verdaderos alcances y los límites que puede tener el movimiento democratizador en los países del norte de África y el Medio Oriente", precisa el experto.



Así, hoy se desarrolla un juego de poder en el que entran por un lado el Ejército, actor político crucial desde la década del '50 del siglo pasado, junto a los antiguos funcionarios del régimen que se incorporaron al gobierno de transición y, por otro, las agrupaciones sociales, políticas y religiosas que buscan conseguir mayor acceso al poder aupadas por las manifestaciones de principios de este año.



En medio, los coptos han comenzado a convertirse en peones del cambio dentro del equilibrio de fuerzas que apunta a reconstruir la política egipcia.



Un actor crucial en este cuadro es la Hermandad Musulmana, poderosa e histórica agrupación islámica evolucionada hacia posturas moderadas. En la actualidad ocupa un creciente arco del espectro político y es reconocida como la fuerza de oposición más cohesionada.



Mientras busca alejarse del “integrismo”, la Hermandad, si bien declaró que considera legítimas las aspiraciones de la comunidad copta en cuanto al derecho de reconstruir y erigir nuevas iglesias –uno de los puntos centrales de sus demandas, y también uno de los aspectos más resistidos por los islámicos integristas-, advirtió que hoy “no es el momento adecuado para reclamarlas” mientras se mantenga en el poder el actual gobierno provisional.



Otra baza la juegan los grupos salafistas, de tendencia islámica radical, con fuerte presencia en los sectores populares y más intolerantes con respecto al empoderamiento de los cristianos.



Un factor importante en este ajedrez es el inesperado renacer del nasserismo nacionalista, seguidor de la herencia de Nasser y más cercano al laicismo. "La izquierda neonasserista agrupada en el partido Hizb al-Karama (Partido de la Dignidad), con dirigentes como Hamdeen Sabahi, se ve muy bien posicionada de cara a las elecciones anunciadas, por el momento, para el próximo año", describe Aranda.



En este cuadro, para poner barreras al crecimiento del nasserismo laico, que probablemente es más tolerante con los cristianos, tanto los sectores más “reaccionarios” en el gobierno de transición como los grupos musulmanes coinciden en la jugada de poner coto a las aspiraciones y exigencias de los coptos. Al mismo tiempo, buscan ganar apoyo entre los sectores populares.



"Así, en esta ‘pasada’ política son los coptos los que pierden", señala el experto.

Este es un debate que no pasa por las reivindicaciones de libertad y democracia. Muestra más bien la voluntad de algunos grupos de enturbiar el proceso de apertura política en Egipto, a través de generar un conflicto más bien ficticio entre dos comunidades que han convivido durante siglos”, apunta Chahuán.



Prudencia pontificia

Un factor que puede tener impacto es la actitud de la comunidad internacional, especialmente la occidental. En Egipto, tal como en el resto del mundo árabe, la figura amenazante del "cruzado" cristiano todavía tiene enorme fuerza, así que un apoyo externo desmedido a los coptos puede azuzar la desconfianza de los musulmanes, lo que redundaría en peores consecuencias para los cristianos si son vistos como "aliados" de las potencias extranjeras.



Por el momento, la Comunidad Europea condenó el lunes la violencia ejercida contra los cristianos coptos, en la voz de la alta representante de la UE para Asuntos Externos y Política de Seguridad, Catherine Ashton. “Esperamos que las autoridades egipcias respondan y que veamos esto en el corazón de la transición egipcia”, aseveró.



Quien se dio cuenta del delicado papel que puede jugar la presión internacional es el Papa Benedicto XVI, quien el miércoles denunció los desórdenes como “intentos de minar la coexistencia pacífica entre sus comunidades que, sin embargo, es esencial para salvaguardar en estos momentos la transición”.



Así, en lugar de apelar a todo trance en la identificación entre los católicos y los cristianos egipcios, el Pontífice se declaró partidario la necesidad de fomentar el diálogo y la tolerancia religiosa, resalta Aranda. "Ése es el único camino viable para la comunidad internacional si no quiere empeorar la situación de los coptos".

Fuertes medidas de seguridad para Panamericanos Guadalajara 2011.

Los Juegos Panamericanos y el reto de seguridad para México

Redacción, BBC Mundo



Este 14 de octubre los Juegos Panamericanos comenzarán en la ciudad mexicana de Guadalajara. Además de los 6.000 atletas que se preparan para las 36 disciplinas, las autoridades también tienen al frente un reto: el de garantizar la seguridad del evento en un país que aparece a diario en los titulares por sus altos niveles de violencia.



Para evitar cualquier problema, hay unos 11.000 policías desplegados tanto en las diferentes sedes deportivas como en las zonas de principal afluencia de personas, además de 650 cámaras de circuito cerrado, aviones no tripulados, vehículos blindados y hasta helicópteros Blackhawk.



"Desde hace meses hay una coordinación entre las autoridades locales, estatales y federales", le explicó a BBC Mundo el comisario José Ramón Salinas, vocero de la Policía Federal mexicana.



"Hay un centro de mando operativo donde confluyen todas las autoridades y todos están cruzando información día a día y pendientes de lo que pueden ver".



¿Cuál es el riesgo?

Guadalajara, la capital del estado occidental de Jalisco, no es una de las ciudades mexicanas con índices más altos de violencia, según los analistas consultados por BBC Mundo.



Adolfo Miranda, director del Centro de Estudios de Seguridad Pública, hizo énfasis en que "al público internacional le debe quedar claro que va a visitar un país en una situación muy difícil, con un enfrentamiento que ha dejado 40.000 muertos, pero que la zona específica donde se realizarán los juegos está relativamente distante de las zonas de mayor conflicto".



Esto no quiere decir, sin embargo, que no haya riesgos.

A principios de este año, el consulado de Estados Unidos en esa ciudad advirtió a sus funcionarios que no debían desplazarse en horas nocturnas debido a los bloqueos de carreteras y actos de violencia, mientras en 2010 uno de los líderes del cartel de Sinaloa, Ignacio Coronel, fue muerto en el municipio del área metropolitana de Guadalajara que es el mismo donde se realizarán la inauguración y clausura de los juegos.



El analista Pedro Isnardo de la Cruz, especialista en seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México, resalta en ese sentido que "en Guadalajara hay un crisol de presencia territorial y financiera importante de varios carteles que operan principalmente en el norte del país".



"Ha tenido niveles tolerables de violencia, pero esto se combina con una alta corrupción policial y gubernamental", añade.



Además, como se trata de un evento de talla internacional y en el que habrá aglomeraciones, se elevan los riesgos a la seguridad.



Por eso, de la Cruz resalta que "la presencia de delegaciones internacionales puede atraer focos de violencia" y Miranda hace énfasis en que se debe recordar "el antecedente triste y muy grave de hace dos años (de un ataque) a la población civil en los festejos del día de la independencia".



Pero Salinas rechaza esta idea y explica que "acá tuvimos el mundial sub-17 y no hubo incidentes y acá tuvimos el juego México-Brasil y tampoco hubo ningún incidente".



"No hay ninguna amenaza"

El comisario Salinas es enfático cuando dice que los Juegos Panamericanos no se verán afectados por la violencia que afecta a México.



"Como nosotros vemos la problemática, es una disputa que tienen los grupos delincuenciales entre ellos. Nosotros no vemos ningún riesgo sobre los juegos. Es un evento totalmente ajeno a cualquier cuestión delictiva y de todos modos estamos preparados".



Salinas añadió que "se descarta cualquier tipo de incidente" y que "no hay ninguna amenaza en absoluto, ninguna".



Finalmente, para el comisario, los operativos para garantizar la tranquilidad durante las competencias no son excepcionales para la situación mexicana sino que se enmarcan en las de cualquier evento deportivo de esa magnitud.



"Este es un evento deportivo de talla internacional que requiere, como en cualquier parte del mundo, de un dispositivo de seguridad. Si uno mira el caso de Brasil (país sede de los anteriores juegos), ellos tuvieron un dispositivo de seguridad y sólo basta preguntar en Londres que están haciendo en materia de seguridad para 2012".

"Esto es parte de la seguridad necesaria".

Cuándo le roban al Estado, le roban a usted....


Acusaciones sobre pensiones a exonerados políticos



Es necesario que se investiguen a fondo las denuncias y si procede la entrega de los beneficios a todas las personas que hoy los reciben.





Una investigación periodística llevada a cabo por el programa Contacto, de Canal 13, ha revelado la existencia de personas que, pese a no cumplir los requisitos, recibieron apoyo de parlamentarios de la Concertación para acceder a pensiones vitalicias en calidad de exonerados políticos. Se trata de una denuncia grave, que amerita una investigación seria de parte de la justicia, así como la adopción de medidas de parte del Ejecutivo, para revisar si quienes perciben actualmente el beneficio reúnen las condiciones para ello.





Los parlamentarios acusados por el programa de televisión, entre los que se encuentra el presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, han sostenido que actuaron de buena fe y que, si bien pueden existir algunos casos en los que hay situaciones irregulares, éstos constituirían la excepción. Es positivo que la Cámara haya decidido crear una comisión investigadora para echar luz sobre el tema y que la Comisión de Ética vaya a revisar las acusaciones vertidas contra parlamentarios. Si bien quien califica la calidad de exonerado político es el Ministerio del Interior, no resultaría admisible que algunos parlamentarios se prestaran para simulaciones que vulneran la ley y obedecerían a una muy baja forma de clientelismo político.





A partir de lo dispuesto en la Ley 19.234, promulgada en 1993, el Estado creó el Programa de Reconocimiento al Exonerado Político, con el objetivo de identificar y entregar ayuda económica a quienes habrían perdido su puesto laboral por razones políticas luego del 11 de septiembre de 1973. Más de 257.000 personas postularon a los beneficios, siendo 157.650 casos declarados admisibles, aunque no todos ellos reciben una pensión. Actualmente, el Estado destina cerca de $ 12.000 millones mensuales al pago de pensiones por este concepto.





Todo indica que, lamentablemente, alrededor de un sistema concebido para reparar a personas que pudieron ser injustamente despedidas se habría creado lo que el subsecretario del Interior califica como "una verdadera industria de pensiones vitalicias". A través de declaraciones improcedentes y la entrega de antecedentes insuficientes o derechamente falsos, personas que no reúnen los requisitos habrían accedido a la ayuda. De acuerdo con lo señalado por el senador DC Hosaín Sabag, en muchos casos fueron asistidas por organizaciones que cobraban un porcentaje de la asignación estatal a cambio de su tramitación ante las autoridades, grupos que habrían actuado con especial fuerza en algunas zonas del país donde existe un número irregularmente alto de personas que obtuvieron pensiones.





Lo que corresponde ante aseveraciones de esta magnitud es que se investigue si tales redes existen y que la autoridad revise la procedencia de los beneficios que hoy se pagan. Mientras diputados oficialistas han solicitado la designación de un fiscal de dedicación exclusiva para indagar las denuncias (petición que fue rechazada por el fiscal nacional, quien ofreció en su lugar uno de dedicación preferente), el gobierno anunció que hará una revisión exhaustiva de más de 50 mil casos de beneficiarios, destinando para ello un equipo a tiempo completo.

Una medida que contribuiría a evitar el mal uso de este tipo de beneficios es que exista un registro público, donde se incluyan todos los beneficios que el Estado paga a las personas, a fin de minimizar la posibilidad de fraudes y facilitar la fiscalización.



(Editorial de Diario La Tercera.)

miércoles, 12 de octubre de 2011

Daños y robos en la UCV, después de 4 meses tomada.........


Destrozos en universidad ocupada

El rector de la Universidad Católica de Valparaíso (UCV) ha denunciado múltiples y graves daños en la casa central y otros tres edificios de ese plantel, comprobados tras el desalojo realizado, a petición suya y por fuerzas de Carabineros, de los estudiantes que los ocupaban. La “toma” de tales recintos se prolongó por cuatro meses, con la consiguiente suspensión de las clases, y ya a comienzos de septiembre se había pedido la intervención de la Justicia debido a que “la Rectoría fue prácticamente asaltada”. No sólo hay pérdidas materiales cuantiosas por destrozo de muebles y equipos electrónicos, numerosos robos, rayado de paredes y acumulación de elementos incendiarios y desperdicios, sino también pérdida de material audiovisual de valor histórico.


Durante el largo conflicto detonado por las protestas estudiantiles, las manifestaciones de violencia han sido muchas, pero inicialmente se destacó como uno de los méritos de los dirigentes el ánimo pacífico y creativo de sus expresiones callejeras. También algunas de las ocupaciones de establecimientos secundarios fueron exhibidas por televisión mostrando el orden interno y el cumplimiento estricto por los alumnos de las normas autoestablecidas, lo que sin duda era encomiable. A la vez la opinión pública condenaba los incidentes producidos al final de cada marcha, que se atribuían siempre sólo a la acción del lumpen y de encapuchados anónimos.


Sin embargo, progresivamente se han ido conociendo los perjuicios habidos en varios liceos por actos de parte de su alumnado, con destrucción de mobiliario y de documentos y hasta intentos incendiarios. A la vez, se ha visto a sectores —minoritarios sí— de estudiantes de enseñanza media y superior atacando a carabineros desde el interior de sus locales y armando afuera barricadas con sus sillas y escritorios, o, cuando estallan en las calles los ya habituales enfrentamientos, actuando a la par que los violentistas, quizás también con sus capuchas. Se trata de una realidad que ha sido minimizada en gran medida por los propios rectores, tal vez inicialmente por simpatía hacia las demandas del movimiento y luego para facilitar el esquivo entendimiento de las partes, evitando polarizar aún más las tensiones existentes. Pero el episodio de la UCV obliga a todos los que han guardado silencio, comenzando por los dirigentes de la Confech y el representante de la respectiva federación, a pronunciarse al respecto y asumir sus responsabilidades.


Tras el fracaso de la mesa de diálogo, los estudiantes buscan reforzar el apoyo externo tanto con un contacto con la OCDE, que puede ser beneficioso, como con su inserción en las campañas mundiales de los “indignados”. En Chile, se acentúa la importancia de la labor parlamentaria en el doble frente de la Ley del Presupuesto y del análisis de los proyectos educacionales. Ojalá la consideración objetiva de la influencia de los sectores extremistas, que se devela, como en la UCV, en el balance final de las “tomas” de liceos y universidades, haga evidente la complejidad del movimiento e impida la tendencia que viene manifestándose a dar por buenas todas sus demandas y condicionar a su aceptación en bloque la legislación futura en la materia.


(Editorial del vespertino La Segunda de hoy)

martes, 4 de octubre de 2011

Crece el movimiento de "indignados" en Estados Unidos.

Crece el movimiento de "indignados" en Estados Unidos

William Márquez, BBC Mundo, Washington







El movimiento Occupy Wall Street en Estados Unidos -que exhorta a la ocupación de la Bolsa de Valores de Nueva York- no tiene un líder definido ni un propósito específico, pero ha logrado cautivar la suficiente atención para empezar a ganar adeptos y extenderse por el país.



Hace poco más de dos semanas, unos diez jóvenes decidieron acampar en el parque Zuccotti, en los alrededores del distrito financiero de Manhattan, en una vaga manifestación contra el poder y la influencia de las grandes corporaciones.



Grupos eclécticos se fueron sumando bajo lemas diversos como la lucha contra la codicia corporativa, la desigualdad social, el cambio climático, desempleo entre varias causas y el fenómeno empezó a replicarse en otras ciudades.



Los principales medios lograron ignorarlos solo hasta este fin de semana, cuando la policía neoyorquina arrestó a unos 700 manifestantes que cruzaban el famoso puente de Brooklyn para unirse a las protestas de Manhattan, acusados de violar los reglamentos que rigen las manifestaciones públicas, como mantenerse en las aceras y no obstruir el tráfico.



De costa a costa

Ahora, Occupy Wall Street ha cautivado la imaginación, la atención y la participación en ciudades de costa a costa.



Los manifestantes acampados en Nueva York tienen su pequeña ciudadela con área de alimentación a base de comida donada, un hospital de primeros auxilios, zona de prensa con computadoras portátiles cargadas por un generador de electricidad y hasta un periódico: Occupy Wall Street Journal.



Tienen una señal continua de video en su sitio internet, blogs y mensajes por todos los medios sociales.



Varios manifestantes se maquillaron y vistieron como zombies (los muertos vivientes de las películas de terror) y empezaron a devorar billetes de monopolio en una explícita metáfora de lo que ellos interpretan como la mentalidad corporativa.



Pero no son solamente jóvenes con reclamos los que se han plegado a la protesta, organizaciones establecidas como los sindicatos en Nueva York la están apoyando en señal de que identifican algo de potencial en el movimiento.



En Washington D.C., una extensa conferencia de tendencia progresiva que se inauguró este lunes con la participación de políticos, ex funcionarios de gobiernos anteriores, sindicalistas y artistas, decidió abrir las sesiones del primer día con un enlace de video "en vivo" con los manifestantes de Manhattan.



Filial en Los Ángeles

Entretanto, en Los Ángeles, California, se ha creado una filial del movimiento, Occupy LA que desde este fin de semana se tomaron el centro de esa ciudad.



La corresponsal de BBC Mundo en Los Ángeles, Valeria Perasso, informa que primero organizaron una marcha pacífica por las calles y luego acamparon frente al edificio de la alcaldía, donde están decididos a permanecer pese a los controles policiales.



Allí armaron sus carpas, una biblioteca y otros centros, incluyendo el de prensa, que funciona muy parecido a lo que ocurre en Nueva York, para aquellos reporteros que lleguen a contar de qué se trata su protesta, cuenta Perasso.



"Esta no es una crisis, es un engaño", dice uno de los carteles con los que intentan atraer la atención. "Sálvenme de mí mismo", dice otro, sostenido por un hombre en zancos disfrazado de Tío Sam.



Según los organizadores, la alcaldía y el centro cívico fueron elegidos por su carácter "estratégico": "estamos a las puertas del gobierno, en el corazón de la ciudad y sólo a unas cuadras de la zona conocida como Banker’s Hill donde los grandes bancos tienen sus casas matrices corporativas o bien oficinas regionales", escribieron los líderes de Occupy LA en su blog.



Precisamente contra los bancos será la próxima acción que tienen prevista: el primero en la mira es Bank of America, que ha anunciado que cobrará a sus clientes por el uso de la tarjeta de débito y ha generado una oleada de protestas, concluye la corresponsal de BBC Mundo.



De la incoherencia a la fuerza

Ese es apenas uno de los reclamos. Hay quienes quieren ver la abolición de la Reserva Federal (Banco Central), como lo expresó a la BBC en Nueva York Brian Phillips, un ex infante de la marina. Otros se quejan de una reciente ejecución de un reo en Georgia, cuya condena aparentemente estaba basada en evidencia dudosa.



¿Cómo puede, entonces, un grupo de tendencias tan dispares evolucionar en un movimiento contundente para el cambio?



"Todos los principales movimientos de protesta han surgido de esta manera", explicó a BBC Mundo Faiz Shakir, vicepresidente del Centre for American Progress, un centro de investigación de tendencia liberal en Washington.



"Empiezan con jóvenes estudiantes que lideran la carga porque tienen el entusiasmo y ven con claridad la dimensión moral de la causa".



Para el analista esa causa moral está en cuestionar la desigualdad del sistema, por qué aquellos que tienen más dinero también tienen el mayor poder político y que el campo de juego no es el mismo para todos.



"Es un mensaje muy sencillo y tiene mucha resonancia", reiteró. "El sistema es injusto y favorece a los ricos. En todo debate político que se tienen en este país son los ricos los que salen beneficiados y el resto de nosotros pierde", afirmó Shakir.



"Lo fundamental es que el estatus quo no está funcionando para ellos y eso atraviesa todas las líneas políticas".



Es por eso que considera que el movimiento es maduro, porque no está atado a un individuo en particular ni a ningún partido político.



Faiz Shakir adiverte que se debe tomar con mucha seriedad este movimiento naciente que se ha galvanizado en una movilización de miles.





Tomado de BBC Mundo.