viernes, 29 de junio de 2012

¿Están los banqueros por encima de la ley?





¿Están los banqueros por encima de la ley?



Las malas prácticas de grandes bancos estadounidenses y europeos estuvieron detrás del estallido de la burbuja inmobiliaria y la consecuente crisis financiera que sigue sintiéndose a ambos lado del Atlántico.


Sin embargo, la percepción es que a la hora de determinar responsabilidades los directivos ejecutivos al frente de las entidades involucradas quedaron exentos de recibir todo el peso de la ley.


La situación hizo que millones de personas perdieran sus casas o quedaran fuertemente endeudadas.


A comienzos de febrero cinco de los principales bancos de EE.UU. acordaron pagarle al gobierno más de US$25.000 millones para resolver reclamos sobre abusos hipotecarios, pero ninguno de sus jefes fue a dar a la cárcel.


Esta semana, la reputación del sistema bancario sufrió un nuevo golpe con el anuncio de que la institución británica Barclays tendrá que pagar US$450 millones a las autoridades de Reino Unido y Estados Unidos por manipular la tasas de interés interbancario que afectan los costos de los préstamos para millones de clientes.


Pese a la presión para que presente su dimisión, el director ejecutivo de Barclays, Bob Diamond, decidió mantenerse en su cargo.


Al mismo tiempo, más allá de este último caso, los llamados para que los responsables de la crisis financiera sean enjuiciados se multiplican.


En declaraciones a la BBC Lord Myners, quien se desempeñó como ministro de la City en el pasado gobierno laborista, dijo que "estas conductas no se detendrán hasta que las personas que las cometen o son responsables de supervisarlas enfrenten posibles cargos penales y prisión".


El exvicedirector de la bolsa de París y presidente de la consultora Ética Soluciones Financieras, Francisco Álvarez, señaló a BBC Mundo que los banqueros no deberían recibir un trato distinto.


"Hay que analizar caso por caso y llegar hasta el final y si efectivamente hay uso indebido o ha habido engaño hay que aplicar la ley como se hace normalmente para cualquier empresa. Existe para las empresas lo que se llama el delito societario. La ley existe. Parece ser que a las entidades financieras y directivos no se les puede aplicar. Claro que sí. Es una realidad que debe ser igual para todos".


Relación "especial"
¿Pero hasta donde deben llegar las responsabilidades en casos como el de Barclays? Sir Martin Taylor, un exdirector ejecutivo del banco, apuntó que "es difícil pensar que una política que parece tan sistemática no fuera conocida cerca del más alto nivel".


Sin embargo, Taylor planteó la posibilidad de que fuese el mismo Diamond quien estuviese a cargo de restaurar la reputación del banco. "Realmente es un asunto que tiene que decidir la junta directiva. Él es un gran líder. Si es él quien puede ayudar a limpiar los establos sólo la junta directiva puede decidirlo".


Sus palabras nuevamente llevan a pensar en que los jefes de entidades bancarias parecerían estar en una situación diferente al común de la gente.


"Creo que hay una relación entre los poderes públicos, los gobiernos y los bancos un poco especial en el sentido que evidentemente muchos gobiernos, particularmente el gobierno español, necesitan emitir deuda y esa deuda finalmente la compran los bancos", apunta Álvarez.


"Eso crea una relación extraña que puede hacer pensar que estos gestores bancarios se encuentran en una situación de privilegio".


Dinero del público.
Los reguladores estadounidenses y británicos dijeron que Barclays había mentido sobre el coste de tomar dinero prestado en un intento por aumentar su beneficio y por dar una imagen de mayor seguridad.


Y parece que Barclays no fue el único. Otras entidades investigadas por manipular tasas de interés incluirían a Citigroup, JP Morgan, Deutsche Bank, HSBC y Royal Bank of Scotland.


Para Álvarez "la averiguación debe hacerse a fondo, tanto a nivel privado con respecto a los clientes como en cuanto a las ayudas públicas, porque se está utilizando un dinero que no pertenece a las entidades financieras".


"El dinero que los bancos utilizan es dinero de sus clientes y la impresión que uno tiene muy a menudo es que los bancos lo utilizan como si fuese de ellos. No es su dinero y los directivos a cualquier nivel deben estar conscientes de eso y la prueba es que cuando estas entidades financieras llegan hacer las cosas mal, una vez más es el dinero público el que les salva la cara".


En ese sentido el editor de negocios de la BBC, Robert Peston, comenta que justamente la forma como los bancos de todas las economías desarrolladas consiguen financiamiento se ha vuelto "horrorosamente disfuncional".


"Los bancos del Reino Unido y EE.UU., así como también los de Europa continental, están encontrando más dificultades para recaudar dinero de fuentes convencionales comerciales y se han vuelto excesivamente dependientes de los préstamos de los bancos centrales", señaló Peston.


En este sentido va el acuerdo presentado este viernes por la Unión Europea, que abre la puerta a la financiación directa de los bancos a través de un fondo comunitario.


En medio de la crisis, Islandia fue el único país que encarceló a muchos de los banqueros responsables de hacer préstamos fraudulentos.


Álvarez apunta que si bien esas acciones son loables es una decisión aislada de un país pequeño y autónomo.


"Este tipo de medidas es más difícil que se puedan poner en marcha en un país que, por ejemplo, comparta el euro. Sí deberíamos tomar el ejemplo y hacerlo de manera coordinada entre los diferentes gobiernos que tienen la moneda única".


Sin embargo, señala el experto, para eso se necesitaría una mayor voluntad política.

(Tomado de BBC Mundo)

jueves, 28 de junio de 2012

Alemania entre la espada y la pared para salvar el euro.

La moneda común europea puede 
estar corriendo un grave peligro.



 
Alemania entre la espada y la pared para salvar el euro.


Alemania es el único país que puede evitar el fin del euro y no está claro si está dispuesta a hacerlo.


Este jueves y viernes, en la reunión a más alto nivel desde que comenzó la crisis del euro, los líderes de la Unión Europea se juegan el futuro de la moneda única. Aunque la eurozona tiene 17 miembros, las miradas están puestas sobre uno de ellos: Alemania.


El problema es doble. Por un lado el gobierno alemán promueve una política de austeridad para una eurozona que está haciendo agua por todas partes.


Por el otro, las fichas del dominó se van desmoronando bajo la implacable lógica del estancamiento y la recesión: ya hay cuatro rescates a nivel nacional (Grecia, Portugal, la República de Irlanda y la de Chipre), uno en marcha a nivel bancario (España) y un miembro de la eurozona (Grecia) con un pie afuera.


"La Eurozona está acercándose al momento de todo o nada. O se estimula el crecimiento y se mutualiza la deuda para proteger a los bancos o la situación se deteriorará aún más muy rápidamente", señaló a BBC Mundo Simon Tilford, del think tank con sede en Londres Centre for European Reform (CER).


Europa toma el té
El acuerdo para invertir US$162.000 millones, alcanzado el viernes por los mandatarios de Alemania, Francia, Italia y España, es más circo político que pan económico.


El plan de crecimiento será presentado ante el Consejo de Europa que se reúne este jueves y viernes en Bruselas, pero los fondos no son nuevos y constituyen apenas un 1% del PIB de la eurozona (la deuda estatal de la eurozona es un 87% del PIB).


Más que un Plan de Crecimiento, el anuncio fue un armisticio entre los dos países que forman el eje de la eurozona: Alemania y Francia.


El presidente francés, Francois Hollande, puede reivindicar la adopción del plan que predicó en su reciente campaña, pero todo tiene un precio.


Hollande terminó aceptando silenciosamente el acuerdo fiscal adoptado el pasado diciembre por la Unión Europea (menos el Reino Unido y la República Checa), caballo de batalla de la canciller alemana Angela Dorotea Merkel.


La canciller es renombrada por su cautela y aversión al riesgo, algo que ella misma reconoce y que atribuye a su formación científica (es química).


Pero su austeridad no es una mera cuestión psicológica: Merkel la predica con una convicción evangélica.


El acuerdo fiscal, que entra en vigor el 1 de enero de 2013, compromete a sus miembros a un déficit estructural no mayor del 0,5% y a que sus cuentas fiscales y la marcha del presupuesto sean monitoreadas por una autoridad europea.


En el actual contexto de estancamiento económico es un chaleco de fuerza que ni siquiera toma en cuenta el tamaño del maniatado: gordo o flaco tiene las mismas medidas.


"Son políticas similares a las que promueve el Tea party en Estados Unidos. El argumento central es que no importa el nivel de contracción siempre que la economía avance hacia un equilibrio fiscal. Pero es exactamente al revés. El nivel de contracción importa precisamente por los niveles de deuda que hay. La economía europea tiene que volver a crecer. No se puede deprimir una economía para recuperar su solvencia", explica Simon Tilford.


Como el Tea party la demócrata cristiana Angela Merkel aplica a la economía la moral del pecado y la redención. Los despilfarradores países del sur europeo deben pagar por sus deslices: el castigo corporal es la austeridad, los despidos, el recorte o congelamiento de salarios.


¿Las manos atadas?
A Angela Merkel no la atrapa solamente su ideología –o su temperamento.


La canciller alemana también tiene trabas a nivel institucional y político. El artículo 23 de la constitución alemana estipula que el gobierno solo puede transferir poderes soberanos mediante una ley con el consenso del Bundestag y el Bundesrat, consejo federal que representa a los 16 estados germanos.


Desde que se desató la crisis con Grecia en 2010, el debate político alemán ha estado condicionado por la necesidad de evitar que las propuestas de rescate no terminaran empantanadas en las cortes.

Las cifras de un rescate también imponen respeto. Alemania es la primera economía de la Unión Europea y contribuye de acuerdo a su tamaño. En mayo de 2010, en respuesta a la crisis griega, la UE acordó la creación de la Facilidad para la Estabilidad Financiera Europea, un mecanismo paneuropeo para pedir prestados hasta US$562.000 millones: Alemania fue el garante de un 27 % de esa cifra.


A más de dos años de ese primer paso y con una crisis muchísimo más profunda, algunas estimaciones calculan que Alemania debería poner sobre la mesa unos US$1,2 billones o 40% del Producto Interno Bruto alemán (PIB), si a Grecia, Irlanda y Portugal se le agregasen Italia y España.


Según otro cálculo, un rescate conjunto de la deuda soberana y bancaria de la eurozona equivaldría a 35 veces la recaudación fiscal germana.


El problema es urgente, pero en algunos casos menos grave de lo que se supone. Italia tiene un superávit fiscal primario (antes de pagar los intereses de la deuda), pero está pagando entre un 6 y un 6,5% de interés.


"Italia no debería estar pagando esta tasa de interés. Incluso España, que está más complicada por el lado de sus bancos, tiene datos macroeconómicos similares a los del Reino Unido. La diferencia es que España está atada al euro, una moneda que no maneja, y el Reino Unido tiene la libra, una moneda propia. El problema de fondo de Italia y España son las tasas de interés. Así no pueden sobrevivir a largo plazo. Y por el momento, la eurozona y el Banco Central Europeo no han intervenido como corresponde para frenar la crisis", señala Tilford.


La hora de los bomberos
La crisis de la eurozona se parece al incendio de un edificio que comienza en la azotea y que todos atribuyen al descuido de un vecino medio alocado (Grecia) a quien reprenden diciéndole que no siga jugando con cerillas y encendedores y prohibiéndole que fume.


Como nadie se ocupa de apagar las llamas, estas alcanzan la tercera planta (Portugal e Irlanda), donde por primera vez aparecen unos cubos de agua lanzados a las apuradas. Recién cuando las llamas bajan a la segunda planta (España) y el fuego amenaza la estructura del edificio, se piensa en los bomberos.


Pero ojo. Se piensa. Que no cunda el pánico. Todavía tenemos la reunión del Consejo Europeo de este jueves y viernes para aportar una nueva provisión de cubos de agua, quizá un poco más grandes que los anteriores, igualmente insuficientes.


"Si el Consejo Europeo no viene con soluciones, la crisis se profundizará. En el caso de Italia será un golpe muy duro para el primer ministro Mario Monti, quien consiguió avanzar en reformas muy importantes sin obtener nada a cambio. No sé si va a durar mucho en su puesto y lo que menos necesitamos es una nuevas crisis política en Italia", señala Tilford.


La crisis está empezando a golpear a la misma Alemania, que tiene un superávit comercial con el resto de la eurozona tan importante como el que China tiene con Estados Unidos y que, por lo tanto, se ve afectada por el estancamiento y la consiguiente caída de las importaciones de los otros países.


Es posible que con las llamas a su puerta el dueño de la planta baja, el más rico de todo el edificio, se acuerde de los bomberos.


Si no lo hace, el colapso del euro –impensable hasta hace poco– comenzará a ser la apuesta del día.


Tomado de BBC Mundo, Textos de Marcelo Justo.


martes, 19 de junio de 2012

Quieren que el ecocidio sea un crimen de lesa humanidad.




 
Quieren que el ecocidio sea un crimen de lesa humanidad.

En el centro de las negociaciones oficiales, la cumbre de Río+20 -que empieza este miércoles en Brasil- está la preocupación por buscar acuerdos políticos que mejoren el destino de la sociedad, particularmente de las más pobres, y de la naturaleza.


Puede que la politíca no sea el escenario adecuado, ni los políticos la gente autorizada para esa misión, a juzgar por el paso glacial, erosionado, de las conversaciones aquí, en Río de Janeiro.


La ciencia tiene claridad en muchos asuntos y los ministros lo reconocen.


Pero hay otros factores también, razón por la que la respuesta política a asuntos como el cambio climático siempre le va a la zaga a la ciencia.


Si la política no le cuadra, ¿qué decir de la ley?


En 1996, el abogado Mark Gray tuvo una visión clara: convirtamos el ecocidio (la destrucción de la naturaleza) en un delito.


Bueno, dirá uno, cualquier país puede hacer eso. De hecho, muchos lo han intentado en diversos grados.


Dependiendo de donde uno viva, encender fogatas en el bosque, robar huevos de los nidos, arrojar aceite de motor a los arroyos y construir en un habitat protegido puede conducirnos a comparecer ante un tribunal.


Sin embargo, otros países no tienen tales leyes.


También, las actividades que dañan al mundo natural a veces ocurren más allá del ámbito de las fronteras nacionales; para citar un ejemplo, la pesca indiscriminada en alta mar.


Los peores delitos
Los peores daños al medio ambiente provienen de las compañías que pertenecen a un país y operan en el territorio de otro.


Esto explica la iniciativa de la abogado Polly Higgins para convertir el ecocidio en uno de los cinco "crímenes contra la paz" internacionales, junto a los crímenes de guerra, al genocidio, a los crímenes contra la humanidad y los crímenes de agresión.


Para la gente del movimiento Eradicating Ecocide ("Erradiquemos el Ecocidio") no se trata de aplicar coscorrones en castigo por la transgresión de la ley.


El año pasado, el movimiento mostró lo que sería un juicio por este potencial delito, en el cual dos ejecutivos de una ficticia compañía canadiense dedicada a la brea enfrentaban un tribunal con auténticos abogados, un juez de verdad y un jurado de verdad.


Uno fue "sentenciado" a cuatro años de cárcel.


Así como los directores de las corporaciones que se extralimitan, el movimiento cree que los ministros y los jefes de gobierno que llevan a cabo o permiten el ecocidio deberían ser juzgados.


Y los casos podrían elevarse a los tribunales en nombre de los habitantes, ya sean humanos o de otras especies.


La postura de Eradicating Ecocide ha ganado apoyo -por cierto, de parte de los ambientalistas, pero también, me aseguran, de algunos gobiernos, aunque no me parece que alguno lo haya reconocido públicamente todavía.


La posibilidad de obtener respaldo de todos los gobiernos parecería ser infinitesimal, especialmente si se toma en cuenta el hecho de que un gran número de ellos ha elegido no reconocer la Corte Penal Internacional y aceptar su jurisdicción.


Este organismo es el que puede oír las causas rotuladas bajo los cuatro crímenes contra la paz.


Pero quizás eso no importe.


El principal objetivo es impedir que ocurran las instancias ecocidas en primer lugar.


Y si hay una compañía que opera en muchos países, en algunos que aceptan la jurisdicción y en otros que no, la compañía tendrá que respetar los estándares de aquellos que sí aceptan.


Un árbol puede no serlo
Si lograr la definición legal de árbol en el Protocolo de Kyoto demoró varios años, ¿cuçanto tomaría definir ecocidio? ¿Qué incluiría una persona común y corriente en el concepto de ecocidio?


La palabra salió al mundo hace unos 40 años, en la primera Cumbre Ambiental de Naciones Unidas en Estocolmo, cuando el primer ministro sueco, Olof Palme, se lo achacó a Estados Unidos respecto al uso de los productos químicos defoliadores durante la guerra de Vietnam.


En la visión de Polly Higgins, los actos ecocidas durante la guerra no son el objetivo principal, porque éstos pueden considerarse bajo algún otro tipo de crimen contra paz.


La preocupación principal es qué ocurre en tiempos normales.


Por ejemplo, una filtración masiva de petróleo causada por negligencia o acción temeraria.


¿Qué pasaría con la pesca o la caza de una especie hasta su extinción?


Si una compañía abre una mina a cielo abierto, digamos, se va a registrar un importante daño ecológico en el área.


Sin embargo, con voluntad y el enfoque adecuado, todo puede volver a su estado original tras la clausura de la mina.


La remoción de tierra original, ¿caería bajo la descripción de ecocidio por el daño que hace?


Será interesante ver cómo se desarrolla la idea de Eradicating Ecocide en los próximos años.






Tomado de BBC Mundo, textos de Richard Black.

sábado, 16 de junio de 2012

Matanza en Paraguay pone en evidencia conflicto sobre tierras.

Al menos 16 personas fallecieron, y unos
80 resultaron heridos,  a consecuencia de
un desalojo de tierras y tiroteo en Curuguaty,
Paraguay.





Matanza en Paraguay pone en evidencia conflicto sobre tierras.


Para algunos se trató del peor hecho de violencia en la historia de Paraguay en relación con un conflicto de tierras.


Más de 200 policías llegaron en la mañana del viernes a desalojar a un grupo de campesinos que ocupaban unos terrenos propiedad del exsenador del Partido Colorado (de índole conservadora) Blas Riquelme, en Curuguaty, unos 400 kilómetros al noreste de Asunción.


En el lugar, señalaron las autoridades, había unas 100 familias que iban a ser desalojadas por las fuerzas de seguridad.


Aún se está tratando de determinar qué fue lo que hizo estallar la violencia, pero lo que sí ya fue confirmado es que al menos 16 personas fallecieron a consecuencia de un tiroteo que se desató en el lugar: nueve víctimas fueron identificadas como campesinos y siete como policías. Uno de ellos era el comandante de las fuerzas especiales del cuerpo policial que participó en el operativo.


"No hay un conflicto por tierras con este número de muertes en la historia de Paraguay", señaló a BBC Mundo Milda Rivarola, historiadora y socióloga paraguaya.


El incidente además dejó unos 80 heridos, algunos de gravedad.

"Lo que ocurrió es que al haber una persona armada hubo disparos que lamentablemente impactaron en efectivos policiales", señaló en rueda de prensa el ministro del Interior, Carlos Filizzola, quien pocas horas después del incidente fue destituido.


"Hubo disparos de parte de ellos, la policía tuvo que responder", agregó Filizzola.


En cambio José Rodríguez, dirigente del movimiento de campesinos que ocupaba los terrenos, indicó a un diario paraguayo que "estos problemas no se solucionan enviando más armas y balas, obviamente por ese camino sólo se van a empeorar las cosas".


La organización de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional, emitió un comunicado en el que urgió a las fuerzas de seguridad a no usar fuerza excesiva, aunque según su visión del hecho "al llegar los policías varios campesinos armados dispararon contra los agentes. Los policías respondieron con más disparos".


El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, ordenó el despliegue de las fuerzas armadas a Curuguaty, luego de conocerse la magnitud de la violencia.


Factores.
La agrupación que estuvo detrás de las ocupaciones se llama Liga Nacional de Carperos y es considerada una de las más radicales en cuanto a sus acciones por el reclamo de las tierras, un conflicto de larga data no sólo en Paraguay si no en toda América Latina.


El grupo afirma que tomó los terrenos propiedad de Blas Riquelme, porque los señala de ser "malhabidos".


Riquelme es un exsenador del Partido Colorado y es considerado cercano al exgobernante militar de Paraguay Alfredo Stroessner.


La agrupación de sin tierras afirma que esta relación se tradujo en la entrega de tierras por parte del Estado al ahora retirado legislador, por lo que el movimiento debía "recuperarlas".


Un informe publicado la semana pasada por la Comisión de Verdad y Justicia, de Paraguay, se aboca al tema de la entrega de tierras por parte del gobierno militar de Stroessner.


En el documento se señala que durante sus 35 años en el poder Stroessner entregó casi siete millones de hectáreas de manera irregular a personas allegadas, lo que se acerca a casi al 19% de la superficie de todo el país.


La Comisión de Verdad y Justicia señala a Riquelme como uno de los principales beneficiados de estas entregas de tierras.


No obstante, José Riquelme, hijo del exsenador y empresario, señaló a medios locales que el lugar que había sido ocupado lo habían declarado como reserva forestal hace dos décadas, aunque se encuentra dentro de la hacienda de su familia.


"Hace veinte años declaramos como reserva forestal la zona boscosa pero desde el año pasado los campesinos la quieren para instalarse en ella. Los fiscales Miguel Rojas y Ninfa Aguilar ordenaron el desalojo meses atrás, pero la Policía no pudo cumplir el mandato porque primero buscó que abandonaran el predio pacíficamente pero se negaron'', dijo Riquelme.


Contexto.
"El origen de esto (la matanza de este viernes) es el conflicto de tierras", señaló la historiadora Milda Rivarola.


"La transición democrática en Paraguay coincidió con una nueva concentración de tierras en manos de pocos y el país sigue siendo controlado por partidos de derecha con fuerte apoyo de terratenientes", apuntó.


La Comisión de Verdad y Justicia, en su informe de junio, señala que casi un millón de hectáreas se entregaron entre 1988 y 2003, tras la muerte de Stroessner, también de manera irregular.


"Es un problema que no se ha podido resolver desde que llegó la democracia y menos hoy en día ya que es muy rentable tener un campo para la agroindustria", dice la historiadora y socióloga.


Paraguay depende fuertemente de la agricultura y la ganadería, siendo ambos sectores los que han impulsado el fuerte crecimiento de su economía en los últimos dos años.


"Este gobierno (el de Lugo) prometió cambiar lo que venía pasando con las tierras, pero ahora está llegando al final de su período y las promesas no se cumplieron. Por ello la paciencia de los grupos más radicales pudiese haberse acabado y ahora todo estalló", acotó Rivarola.


Funcionarios del gobierno paraguayo, como el ministro del Interior, rechazaron que Lugo tenga responsabilidad en el incidente de este viernes.


El mandatario, en respuesta a lo sucedido, convocó de urgencia a todo su gabinete ministerial, aunque en medio de una fuerte presión por parte de sectores opositores quienes pedían la salida de varios de sus integrantes.


Aunque es casi el final de su gobierno, es probable que esta sea una de las más duras crisis que haya enfrentado el mandatario paraguayo.


Tomado de BBC Mundo, autor Vladimir Hernández.