Egipto: vuelven las protestas tras la
condena a Mubarak.
Manifestantes
furiosos se reunieron en la plaza Tahrir de El Cairo, tan solo horas después de
que el ex Presidente Hosni Mubarak fuese
condenado a cadena perpetua por su participación en el asesinato de
manifestantes en 2011.
Pero
la razón de las protestas -que también se llevaron a cabo en ciudades como
Alejandría y Suez- no es solo pedir una condena más severa para el ex líder. La
multitud también dice estar molesta por la absolución de los funcionarios de
seguridad que se encontraban en el juicio junto a Mubarak.
En
total, cuatro funcionarios del Ministerio del Interior y dos Jefes de seguridad
locales fueron absueltos de complicidad en los asesinatos de los manifestantes.
Corresponsales
aseguran que el veredicto, que estaba destinado a cerrar viejas heridas en el país,
ahora está en peligro de volver a abrirlas.
Decenas
de manifestantes también irrumpieron en la sede de campaña del candidato Presidencial,
Ahmed Shafiq -quien fue el último Primer Ministro de Mubarak- en el sur de El
Cairo, según lo informó la prensa egipcia.
"El veredicto se
burla de nosotros"
Algunos
manifestantes en la plaza Tahrir, el punto focal de la insurrección del año
pasado, afirmaron estar decididos a continuar con las protestas.
A
ellos se han unido figuras públicas prominentes y aficionados al fútbol
conocidos como "ultras", que han participado en una serie de
confrontaciones políticas.
El
lema de la revuelta del año pasado ("¡Abajo el Gobierno militar")
volvió a cantarse en la plaza, mientras otros condenaban el veredicto a gritos.
La
periodista de la BBC, Yolande Knell, explicó desde la plaza que existe una
profunda ira por las sentencias absolutorias de los funcionarios, que muchos
toman como una señal de que ha habido pocas reformas.
"El
veredicto se burla de nosotros. Tanto Mubarak como (el ex Ministro del Interior
Habib Adly recibieron sentencias de cadena perpetua, mientras que sus ayudantes
salieron ilesos", señaló el manifestante Sharif Ali a la BBC. "Y
sabemos que cuando ambos regresen a la corte de apelación, serán liberados
también".
Pero,
según la corresponsal, otros han salido a la calles deprimidos por la situación
política actual.
La
primera ronda de las recientes elecciones Presidenciales ha dejado a los
egipcios con dos opciones: un candidato islamista (Mohamed Mursi) y un ex
Primer Ministro de la era Mubarak (Ahmed Shafiq).
Peleas en
los tribunales
El
ex Presidente de 84 años de edad, es el primer ex líder en ser juzgado en
persona desde el inicio de la primavera árabe a principios de 2011.
Al
anunciar el veredicto, el juez Ahmed Refaat, dijo que Mubarak y el ex Ministro
del Interior, Habib al-Adly, habían fallado en impedir que las fuerzas de
seguridad utilizara la fuerza letal contra los manifestantes desarmados. Ambos
fueron condenados a cadena perpetua.
Refaat
insistió en que el juicio -de 10 meses de duración- había sido justo.
También
dijo que la era Mubarak había significado "30 años de oscuridad", y
elogió a "los hijos de la nación que se levantaron pacíficamente por la
libertad y la justicia".
Mubarak
y sus dos hijos, Alaa y Gamal, fueron absueltos de otros cargos de corrupción.
Sus hijos permanecerán en prisión hasta que sean juzgados por la manipulación
del mercado de valores.
Después
del veredicto, estallaron enfrentamientos en los tribunales. Afuera, la
sentencia fue recibida con celebraciones, pero tan pronto se propagó la noticia
de las absoluciones, creció la ira.
La
televisión estatal informó que mientras era trasladado a la cárcel, Mubarak se
negó a abandonar el helicóptero y luego sufrió una recaída de salud. Según
informes, ha sido admitido en el hospital de la prisión.
Mubarak,
quien Gobernó el país desde 1981 hasta 2011, se había enfrentado a una posible
sentencia de muerte por el asesinato de cerca de 850 manifestantes.
El
primer líder derrocado durante la primavera árabe fue Zine al Abidine Ben Ali
de Túnez, que fue declarado culpable en ausencia por cargos de drogas y porte
de armas en julio.
El
líder libio, Muamar Gadafi, fue asesinado por los rebeldes el pasado mes de
octubre, mientras que Ali Abdullah Saleh de Yemen recibió inmunidad después de
entregar el poder en noviembre.
Tomado de BBC Mundo.
Las condenas:
Hosni
Mubarak: culpable de conspirar en el asesinato de manifestantes. Cadena
perpetua, inocente de corrupción.
Alaa
y Gamal Mubarak: inocentes de corrupción.
Habib
al-Adly, ex Ministro del Interior: culpable de conspirar en el asesinato de
manifestantes. Cadena perpetua.
Cuatro
altos funcionarios del Ministerio del Interior (Abd El Rahman, Adli Fayed,
Ahmed Ramzy, Ismail al-Shaer): inocentes de los cargos de complicidad,
instigación y prestación de asistencia en el asesinato e intento de asesinato
de manifestantes.
Hussein
Salem, empresario magnate: inocente de corrupción.
Dos Directores de la Seguridad Metropolitana de
El Cairo (Osama al-Marassy y Faramawy Omar): inocentes de daños causados a la
propiedad y la economía egipcia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario