lunes, 8 de noviembre de 2010

Hitos trascendentes,

por Rafael Aldunate.

A juzgar por las reiterativas y masivas protestas —¡alta presencia de menores de 40!— en Francia por sólo incrementar en dos años la edad de jubilar (62), significa que no han tomado conciencia de la gravedad de la precaria situación financiera del Estado. Y consideran que lo macro es un tema de los economistas, no valorando que viven 28 años pasivamente financiados por una disminuida fuerza de trabajo activa. No se conjuga el verbo realismo y austeridad. ¿El Estado benefactor es un ente abstracto pero incondicional? Las explicaciones políticas siempre vienen primero, pues son más fáciles de vender, como sostiene con tanta propiedad el académico y renombrado escritor Guy Sorman.


Europa tiene manifiestos problemas para cubrir las deudas de muchos de sus bancos, y uno de cada cuatro propietarios estadounidenses debe una hipoteca mayor al valor de su casa. La aritmética nos lleva al obligado próximo paso: la reducción efectiva de los valores de la deuda y recortes de capital. No es y no ha sido suficiente reducir las tasas o estirar los plazos de las deudas y préstamos. ¡Face reality!


No perdamos de vista que todo el mundo, circunstancias únicas, de una y otra forma se está conduciendo con un sistema de economía de mercado —capitalista—, por lo tanto más expuesto a convivir entre burbujas y depresiones.


Mayoritarias proyecciones —integro el Comité Consultivo del Cobre del Ministerio de Hacienda— vaticinan un precio del metal rojo mayor a US$ 3/libra para los próximos 18 meses. En términos simples y prácticos, Chile genera ingresos en dólares y gasta en pesos (Presupuesto Nación), lo que le condiciona a liquidar dólares, inclinando la divisa a la baja. El peso se ha apreciado desde el 2009 un sensible 20% respecto del dólar; sin embargo, un más atenuado 10% frente a todos nuestros socios comerciales. Aun así, muchos sectores productivos, con acento en la agroindustria y metalmecánico, no “alcanzan” su línea de flotación…


El selecto grupo de cuatro economistas norteamericanos que invitó nuestro ministro de Hacienda —incluyendo un Premio Nobel— nos hizo un coincidente y lapidario diagnóstico de su país. Desde los problemas fiscales, como la híbrida reforma a la salud, y sostuvieron que la reforma financiera no va a la médula del problema. Dicen que no hay solución si no se recorta el gasto o se suben los impuestos, y la disyuntiva de que la FED continúe imprimiendo es sólo dopar la economía con más deuda, no con crecimiento sostenido y con raíces. Sostienen que la forma primordial de salir de la crisis es vincularse al mercado, que es el que emprende, innova, agrega valor e incorpora productividad. Me sumo a esta convicción, experiencia y realidad práctica de cinco directorios…


Desacoplamiento efectivo y progresivo. EE.UU. y Europa post su recuperación inicial pierden valor. Como sostiene el visionario economista Roubini, un crecimiento de 1% no es técnicamente una doble recesión, pero se va a sentir como una recesión, porque no da para creación de empleos. Y con un 9,7% de desempleo no hay espacio al mayor consumo ni incentiva la inversión. Alto riesgo que lo cíclico se puede transformar en estructural. Para los países BRIC, las exportaciones a EE.UU. sólo representan el 5% de sus PIB. Como moneda de cambio, los propios países emergentes están incrementando su consumo interno a un ritmo promedio de un 11%; es decir, logran mayor autosuficiencia, aportando el 60% del delta incremento del PIB mundial. El centro de gravedad del crecimiento global se traslada desde EE.UU. a China, e India primordialmente.

Tomado de Diario La Segunda.